Pedro López Calderón fue un pintor novohispano activo entre las dos últimas décadas del siglo XVII y las tres primeras de la siguiente centuria. Aunque durante la mayor parte de su carrera se mantuvo asentado en la Ciudad de México, sus obras se extienden desde la región chiapaneca en el sur a los centros mineros del septentrión novohispano, existiendo testimonios de su trabajo en buena parte de las principales ciudades del México virreinal. Su figura y producción habían sido muy poco atendidas hasta la fecha, en que recientes estudios las están recuperando y empezando a dar a conocer. Entre otros sugerentes resultados, nos sorprende descubrir a un pintor particularmente valorado por el cliente hispano, al que podemos intuir detrás de mucho...